Diseñado sobre una casona colonial, su fachada se recorta sobre el paisaje arbolado. Sus 28 habitaciones poseen distintas dimensiones de acuerdo a su categoría y las mejores vistas a la Quebrada de San Lorenzo y los cerros que se extienden hacia el Norte.
Recientemente renovado, combinados el confort moderno y los detalles en madera y piedra que dan la calidez típica del Norte Argentino. El murmullo del río, el canto de los pájaros y la imponente vista completan el paisaje.
Una amplia variedad de servicios y espacios comunes permiten disfrutar toda la jornada en el hotel. El vasto parque se extiende hasta el arroyo de la Quebrada de San Lorenzo, y su piscina con vista a los cerros, junto al quincho y asador, ofrece pasar todo el día en familia y en buena compañía. El excelente servicio incluye asesoramiento sobre el destino y las excursiones para realizar en los alrededores.
INFORMACIÓN PRÁCTICA
Además de diversos programas de políticas sustentables, el hotel participa activamente en la disminución de nuestro impacto ambiental con las siguientes acciones:
- Separación de residuos y materiales para campaña de recuperación de árboles nativos, a través de un vivero, en Reserva del Huaico.
- Descuentos en alojamiento en eventos a organizaciones para la conservación del ambiente
En el día a día:
Cuenta con colector solar para reducir el consumo energético. No hay frigobares dentro de las habitaciones (su uso puede consumir más de diez mil Kw al año, lo cual representa 6500kg de emisiones de carbono). En su reemplazo cuenta con servicio de bar las 24hs, y un espacio en sus heladeras para los huéspedes. Recambio de toallas y toallones: si se dejan colgadas no se cambian.
Se vende el mínimo posible de botellas de plástico, la mayoría de ellas son de vidrio retornable.
Todo el estableciemiento es no fumador.